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jueves, 8 de octubre de 2015

La Promesa de Dios es nuestra realidad

Es posible que debido a las circunstancias que estamos pasando, sintamos una desconexión entre las promesas de la Biblia y nuestra realidad.  Realidad de angustia, realidad de escasez, realidad de opresión, realidad de temor, realidad de deudas, realidad de falta de trabajo, realidad de separación, realidad de abuso...

Romanos 8:37 dice: "Más bien, en todo esto salimos más que victoriosos por medio de Dios quien nos amó."  (PDT)

Sí, has leído bien.  En todo esto hemos salido más que victoriosos.  Aún cuando la realidad sea adversa, la verdad es que tenemos la victoria en Cristo Jesús.

El apóstol Pablo nos dice que nosotros viviremos de Gloria en Gloria, y en 2 de Samuel 22:30 encontramos esta declaración: "Contigo desbarataré ejércitos, y con mi Dios asaltaré muros."  (RVA1960)

Sabes, esto significa que la escritura, ese documento público, de nuestra nueva vida, ya está firmado, una escritura que dice que el Señor, nuestro Dios, nos lleva de tierra árida y desierta a Tierra Prometida, de maná a espigas nuevas tostadas todos los días como fruto de esa tierra de abundancia.

"De esta manera el SEÑOR les dio a su pueblo toda la tierra que les había prometido a sus antepasados que les daría.  Y tomaron posesión de ella y vivieron en ella.  El SEÑOR les dio descanso por todos lados, conforme había prometido a sus antepasados.  Ninguno de sus enemigos había sido capaz de oponérseles.  El SEÑOR les permitió derrotar a todos sus enemigos.  Ninguna de las buenas promesas que el SEÑOR había hecho a Israel había fallado.  Todo se convirtió en realidad."
Josué 21:43-45 PDT

Como parte del pueblo de Dios, personaliza esta promesa para ti, para tu casa y sobre todas tus circunstancias.  ¡Tus días de Gloria han llegado...!  Esta es tu nueva realidad...


miércoles, 16 de septiembre de 2015

Ezequías tomó la carta

Ezequías tomó la carta y la presentó delante del Señor.  ¿Por qué no hacer nosotros lo mismo?
Hoy podemos hacerlo, podemos tomar nuestras cartas y presentárselas al Señor.  Vamos a tomar esa carta del banco, vamos a tomar ese estado de cuenta negativo, vamos a tomar la hipoteca de la casa, ese dictamen médico negativo, o bien esa solicitud de divorcio o esa citación que ha llegado y se la vamos a presentar a nuestro Dios, como hizo Ezequías con la carta que le envió Senaquerib.
Presenta tus cartas delante de Dios y dile: "Señor abre tus ojos y mira."  El Señor, nuestro Dios, actuará y acabará con todo ese ejército de asirios.  No lo dudes, presenta con fe tus cartas delante de Dios.
¡Preséntalas todas y Dios actuará!

"Ezequías recibió las cartas de mano de los mensajeros y las leyó. Luego subió al templo del SEÑOR y extendió las cartas delante del SEÑOR.  Después Ezequías oró al SEÑOR así: "SEÑOR Todopoderoso, Dios de Israel, el que está sentado en su trono entre querubines, tú eres el único Dios de todas las naciones de la tierra.  Tú creaste los cielos y la tierra.  SEÑOR, presta atención, escucha.  SEÑOR, abre tus ojos y mira.  Oye las palabras que Senaquerib envió para insultar al Dios vivo.  Es muy cierto, SEÑOR, que los reyes de Asiria han destruido todas las naciones y sus territorios, han tirado sus dioses al fuego, aunque en realidad no eran dioses, sino producto de los seres humanos; eran de madera y piedra, y por eso fueron destruidos.  Ahora Dios, SEÑOR nuestro, sálvanos de caer en manos de ese rey, para que todos los reinos de la tierra sepan que tú, SEÑOR, eres el único Dios".  Entonces Isaías hijo de Amoz le envió este mensaje a Ezequías: El SEÑOR, Dios de Israel, dice: "Te he escuchado acerca de lo que me pediste en cuanto a Senaquerib rey de Asiria"…  Entonces el ángel del SEÑOR fue al campamento asirio y mató a ciento ochenta y cinco mil soldados.  Cuando la gente se levantó al otro día, estaban allí todos los cuerpos de los muertos.  Entonces el rey Senaquerib de Asiria se retiró…"
Isaías 37:14-21, 36-37a PDT

ORACIÓN
SEÑOR Dios Todopoderoso, tú que estás sentado en tu trono entre querubines, tú eres el único y verdadero Dios.  Tú creaste los cielos y la tierra, todo lo que existe es obra de tus manos y sin ti, nada de lo que es, sería.  
Dios mío, presta atención, escucha SEÑOR, abre tus ojos y mira.  Te presento estas cartas que insultan al Dios vivo y su obra.  Es muy cierto SEÑOR que muchas veces razones como estas han destruido muchas personas o familias, pero hoy te estoy trayendo estas cartas para que conozcas mi situación y actúes evitando esa destrucción.  Ahora Dios, SEÑOR nuestro, sálvame de caer en manos del enemigo, para que todos los reinos de la tierra sepan que tú SEÑOR, eres el único Dios.  
Envía al ángel del SEÑOR para que elimine toda obra del enemigo en mi vida y la de mi familia, para que elimine todo decreto que se haya levantado en contra de tus hijos.  Te lo pido en el nombre de tu hijo amado Jesús, AMÉN.



jueves, 6 de agosto de 2015

Luchando con las circunstancias difíciles

Filipenses 3:7-11 - NVI
"Sin embargo, todo aquello que para mí era ganancia, ahora lo considero pérdida por causa de Cristo.  Es más, todo lo considero pérdida por razón del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor.  Por él lo he perdido todo, y lo tengo por estiércol,  a fin de ganar a Cristo y encontrarme unido a él.  No quiero mi propia justicia que procede de la ley, sino la que se obtiene mediante la fe en Cristo, la justicia que procede de Dios, basada en la fe.  Lo he perdido todo a fin de conocer a Cristo, experimentar el poder que se manifestó en su resurrección, participar en sus sufrimientos y llegar a ser semejante a él en su muerte.  Así espero alcanzar la resurrección de entre los muertos."

El apóstol Pablo sabía cómo lidiar con las circunstancias difíciles.  Aunque estaba preso, mantenía su mirada puesta en Cristo, y confiaba firmemente en el Salvador.  Por eso, a pesar de estar en la cárcel, era capaz de celebrar la obra del Señor en su vida.  En realidad, la epístola que escribió desde la cárcel a los filipenses rebosaba de júbilo y alabanza.

Filipenses 1:18 – RV60 "¿Qué,  pues?  Que no obstante, de todas maneras, o por pretexto o por verdad, Cristo es anunciado; y en esto me gozo, y me gozaré aún."

Filipenses 3:1a – NVI  "Por lo demás, hermanos míos, alégrense en el Señor."

Filipenses 2:18 – PDT  "Alégrense también conmigo y compartan mi alegría."

Enfocarnos en Cristo no es una reacción natural ni tampoco fácil.  Nuestro instinto es pensar en la situación actual, en la búsqueda de soluciones o afligirnos frente al dolor y la dificultad.  Como resultado, los problemas lucen aterradores y nos abruman con una sensación de derrota.

Sin embargo, el miedo y la derrota no pueden vivir por mucho tiempo en un corazón que confía en el Señor.  No es que debamos olvidarnos de lo que estamos pasando, pero sí podemos optar por pensar en la ayuda y el cuidado del Señor. 

Él es el Rescatador: "Él nos rescató del gran peligro de la muerte y nos seguirá rescatando.  Pusimos nuestra esperanza en Dios y él nos rescatará de nuevo."  (2 Corintios 1:10 – PDT). 

Él es el Sanador y Salvador: "Señor, sáname y quedaré sanado; sálvame y seré salvo, porque tú eres a quien yo quiero alabar."  (Jeremías 17.14 – PDT).

Él es el Guía: "Ten presente al Señor en todo lo que hagas, y él te llevará por el camino recto."  (Proverbios 3.6 – DHH).

Al aferrarnos a las promesas divinas descubriremos que Dios hace retroceder las emociones negativas.  En vez de éstas, la esperanza, la confianza y el contentamiento se alojan en nuestra vida: "No lo digo porque yo esté necesitado, pues he aprendido a contentarme con lo que tengo."  (Filipenses 4:11).  Nadie siente felicidad por una situación difícil, pero es posible sentir satisfacción al saber que Dios tiene el control y que sacará algo bueno de nuestra dificultad.

Los principios y las promesas del Señor no cambian, no importa qué tan grave o dolorosa sea la situación.  Al enfocarnos en Cristo en vez de en las circunstancias, Dios tranquilizará nuestro corazón y nos guiará.  Entonces estaremos listos para "regocijarnos en el Señor siempre."  (Filipenses 4:4).

ORACIÓN
Señor te doy gracias, porque sé que nunca me has dejado solo; Tú eres mi rescatador, mi sanador, mi salvador y mi guía.

Sin importar la situación que esté enfrentando hoy, me aferro a tus promesas.  Sé que Tú tienes el control y sacarás algo bueno de mi situación.  Ni tú, ni tus promesas cambian.  Tú cumplirás, como dice Tu Palabra, todo lo que has escrito acerca de mí, en Tu libro (Salmo 139:16), en el nombre de Jesús de Nazareth, Hijo del Dios Altísimo, Amén.


martes, 31 de marzo de 2015

2015 Año de Jubileo, Año Sobrenatural

El Pueblo Cristiano es gente privilegiada por Dios, somos un pueblo que puede disfrutar de las palabras y de la Guía Profética del Altísimo para cada año que comienza.

La Biblia nos enseña que cada siete años habrá un año Semita.  Esto quiere decir que la tierra no será trabajada y el producto de la tierra no será comprado ni vendido.  Este año 2015, corresponde al año bíblico 5775, un año Semita, un año de Jubileo.      

El año de Jubileo le pone punto final a ese ciclo de 7 períodos de 7 años; es decir, el Jubileo es el año 50.  Por ser un año sabático, se proclama libertad por toda la tierra.  Para los israelitas que habían sido vendidos en esclavitud debido a las deudas contraídas y no pagadas, ese año significaba la liberación de todas sus deudas.

Sabido lo anterior es importante que entendamos qué tiene este año para nosotros  el pueblo del Señor. 

2015: Un año de descanso.
Lev 25.4-7
“pero el séptimo año será un tiempo de completo descanso para la tierra, en honor al SEÑOR.  Ustedes no deben sembrar los campos, podar las viñas, cosechar lo que crezca por sí solo, ni recolectar las uvas de los viñedos sin podar.  Ese será un año de completo descanso para la tierra.  Pero lo que la tierra produzca por sí sola en el año de descanso será de ustedes, para que lo coman ustedes, sus sirvientes, sus trabajadores y los extranjeros que vivan con ustedes.  También será para que coman su ganado y los animales salvajes del país; se podrá comer todo lo que la tierra produzca ese año.”

2015: Un año santo y un año de Libertad.
Lev 25.10
“el año cincuenta se proclamará santo y se declarará la libertad para todo el que viva en el país.  Ese año se llamará el año del Jubileo.  Cada uno de ustedes recuperará su propiedad y volverá a su familia.”

Num 15.41
“Yo soy el SEÑOR su Dios, que los sacó de Egipto para ser su Dios.  Sí, yo soy el SEÑOR su Dios.”

2015: Un año de restitución.
Lev 25.13
“En el año del Jubileo cada uno de ustedes volverá a su propiedad.”

Lev 25.18
“Ustedes deben obedecer mis leyes, cumplir mis mandamientos y ponerlos en práctica para que puedan vivir en la tierra de una manera segura.  El campo producirá sus cosechas, tendrán suficiente para comer y vivirán con seguridad en la tierra.”

2015: Un año de cosecha abundante.
Lev 25.21-22
“Yo enviaré mi bendición el sexto año de tal manera que ese año la tierra produzca suficiente para tres años.  Cuando vuelvan a sembrar en el octavo año, ustedes todavía estarán comiendo de la última cosecha, e incluso en el noveno año estarán comiendo todavía de la última cosecha hasta que llegue la cosecha nueva.”

2015: Un año de conquista y expansión a nuevos territorios.
Num 13.30
“Luego Caleb le pidió a la gente que estaba cerca de Moisés que se callara y dijo: -¡Vamos y apoderémonos de esa tierra! Con seguridad que la conquistaremos.”

2015: Un año de reposo y paz.
Num 10.9
“Cuando estén en su tierra y el enemigo los ataque, ustedes tendrán que salir a pelear.  En esas ocasiones toquen las trompetas y griten fuerte, así yo, el SEÑOR su Dios, les prestaré atención y los salvaré de sus enemigos.”

2015: Un año para ver el poder de Dios.
Num 11.23
“El SEÑOR le dijo a Moisés: -¿Es que acaso el poder del SEÑOR tiene límites?  Ahora verás si lo que he dicho sucede o no.”

2015: Un año para apoderarnos de lo que Dios nos ha dado.
Num 13.30
“Luego Caleb le pidió a la gente que estaba cerca de Moisés que se callara y dijo: ¡Vamos y apoderémonos de esa tierra! Con seguridad que la conquistaremos.” 

2015: Un año para que nuestros hijos crezcan fuertes, seguros y como pilares inamovibles.
Salmo 144.12
“Que nuestros hijos sean como árboles
fuertes en su juventud.
Que nuestras hijas sean como columnas
labradas que adornan un palacio.”

2015: Un año de abundancia de alimentos y trabajo.
Num 13.30
“Que nuestras despensas estén llenas de toda clase de alimentos.  Que haya miles de ovejas en nuestros campos.”

2015: Un año donde la angustia y el dolor se van.
Salmo 144.14
“Que las vacas estén grande con cría.
Que no pase ningún enemigo por nuestras puertas.
Ni se lleve nuestra gente del país.
Que no haya gritos de dolor por las calles.”

No habrá gritos de dolor por enfermedad, no habrá gritos de dolor por escasez financiera, no habrá gritos de dolor por soledad, no habrá gritos de dolor por falta de trabajo, no habrá gritos de dolor por mis hijos, no habrá gritos de dolor por tristeza, no habrá gritos de dolor en mi matrimonio, no habrá gritos de dolor en mi hogar, no habrá gritos de dolor por los estudios, no habrá gritos de dolor…

2015: Un año donde Dios no desechará Su Pacto.
Lev 26.45
“Por el contrario, tendré presente para bien de ellos el pacto que hice con sus antepasados a los que saqué de Egipto para ser su Dios, pues yo soy el SEÑOR.”

2015: Un año de bendición.
Num.  6:24
“Que el SEÑOR te bendiga
y te proteja;
que el SEÑOR sea bueno contigo
y te tenga compasión.
Que el SEÑOR te mire con amor
y te haga vivir en paz”.

·         Para este año 2015 todas tus deudas serán pagadas o perdonadas, en el nombre de Jesús. 
·         En el año de Jubileo tu vida dará un giro completo. 
·         Títulos de tierras y propiedades te serán entregados. 
·         Riquezas de los impíos serán transferidas a ti, porque has sembrado y dado. 
·         Dinero y negocios vendrán a ti. 
·         Tú copa está llena, y Dios está a punto de derramarla.
·         Este es el año de la doble porción. 

2 Reyes 2:9-15
“Mientras cruzaban el río, Elías le dijo a Eliseo: -Pide lo que quieres que haga por ti antes de que sea separado de ti.  Eliseo declaró: -Ah, si pudiera recibir una doble porción de tu espíritu.  Elías le dijo: -Has pedido algo difícil, pero si logras verme cuando sea separado de ti, recibirás lo que has pedido.  Pero si no logras verme, entonces no lo recibirás.  Elías y Eliseo caminaban juntos charlando.  De repente, llegaron un carro y unos caballos que parecían de fuego, los cuales separaron a Elías de Eliseo.  Elías fue llevado al cielo en un torbellino.  Al verlo, Eliseo gritó: “¡Padre mío, padre mío! ¡Carro de Israel y sus caballos!”  Eliseo nunca más volvió a verlo.  Entonces Eliseo rompió en dos su ropa.  El manto de Elías se había caído a la tierra, entonces Eliseo lo agarró y se volvió.  Se estuvo de pie a la orilla del Jordán, golpeó el agua con el manto y dijo: “¿Dónde está el SEÑOR, el Dios de Elías?”  Cuando Eliseo golpeó el agua, el río se separó en dos y Eliseo lo cruzó.”

Atrévete a golpear el agua hoy, y ella se abrirá.  Atrévete a descansar en el Señor y Él hará…

Dios llena tu copa con abundancia, haz lo tuyo llénala con tu alabanza, con tu adoración, con acción de gracias, con ofrendas de olor grato y más... 

Salmos 144.15
”Qué afortunado el pueblo que vive así;
Qué afortunado el pueblo cuyo Dios es el SEÑOR.”



lunes, 16 de febrero de 2015

Tú eres obra maestra de Dios

El Señor me ha enseñado a través de los años que tengo que darme valor por lo que Él ha dicho que soy y no por lo que el mundo diga, o lo que yo crea, o lo que parezca en medio de la tempestad.  De hecho, la tempestad nos tapa la visibilidad.
Si pasamos nuestros días murmurando: "Yo nunca voy a hacer la diferencia; yo no valgo nada, todo está mal", ¿adivina qué?  ¡Nos sentenciamos a una vida de tristeza, y sin libertad condicional!  Cuando eso hacemos, estamos cuestionando el juicio de Dios, dudando de su voluntad.
El Salmo 139:14 dice: "Te agradezco porque me hiciste de una manera maravillosa; sé muy bien que tus obras son maravillosas." (PDT)  Sabes, Dios no puede dejar de pensar en ti: "Tus pensamientos son preciosos para mí; la suma de ellos es inmensa.  Si pudiera contar cada uno de tus pensamientos, serían más numerosos que los granos de arena, y cuando terminara de contarlos, tendría todavía que continuar."  (Salmos 139:17-18 - PDT)  Sus pensamientos sobre ti, son más numerosos que los granos de arena.
¿Por qué Dios te quiere tanto?  Por la misma razón que el artista ama sus pinturas o el constructor de barcos ama a sus buques.  Porque eres la idea de Dios.  Y él sólo tiene buenas ideas...  Pablo dijo en Efesios 2:10, "Nosotros somos obra de Dios, fuimos creados por Cristo para hacer el bien tal como Dios ya lo tenía planeado." (PDT)
!Tú eres importante para Dios!

ORACIÓN
Padre, reconozco que en muchas ocasiones he murmurado contra ti al reclamar por mi condición actual.  Sin embargo, hoy veo que siempre estoy en tus pensamientos.

No permito que la tormenta me ciegue, por el contrario, espero con ansias la salida del sol, y aquí en medio de la tempestad, te espero sabiendo que harás lo imposible para llegar donde estoy y ayudarme.  Sé que si tienes que caminar por el mar para hacerlo, lo harás.

Hoy cambio mi actitud y en medio de la tormenta pasajera, te alabo y glorifico, porque sé que "Si por la noche hay llanto, por la mañana habrá gritos de alegría." (salmo 130:5b - NVI).  En el nombre de tu hijo amado Jesús, AMÉN.